Existe un grande sol de nombre Capela, en la constelación de Cochero, muy lejos de la Tierra.
Hace muchos milenios, uno de los planetas (muy parecido con la Tierra) de este sol llamado Capela evoluciono bastante moralmente y espiritualmente. Sin embargo, había allí millones de Espíritus rebeldes que no acompañaron la evolución del planeta, puesto que no habían aprendido sobre el amor y la caridad.
Los Espíritus superiores que gobernaban aquel planeta resolvieran enviar esos Espíritus en retraso espiritual para reencarnaren en otro planeta, ya que ellos no tenían condiciones de reencarnar en el mismo planeta. Y ellos eligieron la Tierra para las próximas reencarnaciones de estos Espíritus, puesto que aquí ellos podrían aprender, a través del trabajo y de las dificultades, sobre los nobles sentimientos y las virtudes que aún no adquirieran en su caminada evolutiva.
Jesús, o Gobernador de la Tierra, recibió estos Espíritus, cubriéndoles de amor, trabajo y oportunidades de ejercitar el bien y la caridad.
Fueron tiempos difíciles para estos Espíritus, porque eles tenían, intuitivamente, añoranza de su planeta natal y de sus amigos que allí dejaron. Ellos se sentían como exilados – alguien que deja a su patria para ir a vivir en otro lugar. Hay un libro que cuenta la historia de estos Espíritus: Los Exilados de Capela, del autor Edgard Armond.
Los Espíritus que llegaron de Capela ya habían oído hablar de Dios y de sus leyes, y pasaron a cultivar, con esfuerzo, el bien y la caridad en la Tierra, con el objetivo de evolucionar y regresar a sus hogares. Ellos reencarnaron en Egipto (y dieron origen al pueblo que construyó las pirámides), en Israel, en la India y en algunas partes da Europa. La civilización de Egipto fue la que más se destacó, con el culto a Dios y la práctica del bien. Todos los exilados evolucionaron regresando a su planeta, sin embargo algunos se esforzaron más y llevaron menos tiempo, y otros necesitaron de más encarnaciones para adquirir las virtudes eternas.
En el libro La Camino de la Luz, psicografiado por Francisco Cândido Xavier, hay una parte dedicada a la historia de esos Espíritus que vieron de Capela. Esta obra también narra toda la trayectoria evolutiva da Terra, desde su formación, los primeros habitantes, hasta la llegada del Consolador Prometido por Jesús – el Espiritismo.
La historia de los Espíritus exilados de Capela nos alerta para que nos esforcemos para evolucionar, ya que la Tierra va a transformarse, en breve, en un Mundo de Regeneración y, si no aprendernos a hacer el bien, a amar al prójimo, siguiendo las enseñanzas de Jesús no reencarnaremos en la Tierra. Podremos ser enviados, como los habitantes de Capela, para un planeta lejano, probablemente lejos de las personas que amamos, con el fin de enfrentarnos nuevas pruebas que nos harán evolucionar, porque la ley de progreso y de evolución es para todos, indistintamente.